
Se trata de un conjunto de muebles que fueron fabricados originalmente para decorar las residencias de presidentes y embajadores y que componen la denominada “edad de oro” del mueble francés, que unió las manufacturas de Beauvais, Gobelins y la Savonnerie. Cabe destacar que la bonanza económica que vivió el país por aquellos años permitió que también fueran adquiridos por privados.
El “Mobiliario Nacional francés” refleja algunos de los monumentos y paisajes más emblemáticos de Francia, los que han servido de inspiración para los artesanos tapiceros de la época, cuyo trabajo ha sido restaurado especialmente para esta exposición en la galería de los Gobelinos.
Es importante recordar que luego de la Segunda Guerra Mundial el estilo que caracterizó al “Mobiliario Nacional francés” cambió de manera radical porque las instituciones francesas se volvieron más austeras y esas piezas cayeron en desuso.